¡Hola mis recolectores de plástico favoritos!

Como habéis podido ver en nuestras redes sociales hace un par de semanas lanzamos un nuevo producto. Esta vez no se trata de plástico reciclado, pero sí de evitar que más microplásticos acaben en los océanos ¡Hablamos de camisetas hechas con 100% algodón orgánico y diseñadas por nosotros!

Cuando decimos que tratamos de evitar que más microplásticos lleguen al mar, es porque el 35% de los microplásticos liberados en los océanos proceden de la ropa hecha con tejidos sintético. ¿Qué cómo es eso posible? Pues bien, cada vez que lavamos una prenda se pueden liberar hasta 1 millón de fibras que no somos capaces de ver, pero que están ahí. Esto se debe a que el poliéster, un tipo de plástico, es muy utilizado en esta industria para que las camisetas, pantalones, chaquetas etc. no se arruguen con tanta facilidad, no se deformen y absorban mejor las tintas, entre otros beneficios.

Súmate a la moda lenta

Nos subimos al carro del Slow Fashion o Moda Lenta. Un movimiento filosófico que trata de concienciarnos sobre el impacto de las prendas de vestir en el medio ambiente, el agotamiento de nuestros recursos y la huella que deja la industria textil en la sociedad.

Muchas grandes marcas han sacado su línea ECO, algunas son dudosa, pero otras  pequeñas están abriendo paso. Fomentando el comercio cercano y justo. Fabricando sus prendas con materiales de una manera sostenible y sin exportar los materiales de otros países. Apostando por una economía circular y lo más local posible.

¿Cuál es el mejor tejido para una más moda sostenible?

Conociendo esta problemática existente, pensamos en que podríamos aportar nuestro granito de arena en este sector. Una de las primeras ideas que se nos vino a la cabeza fue hacerlas con plástico reciclado. Algunas marcas como Sundried ya lo hacen en algunas de sus camisetas y son muchos los que apuestan por ellas.

Camiseta de plástico reciclado

Aparentemente ofrece ventajas a la prenda final, quizá se pueda utilizar  aunque produzca microplásticos. El ahorro de recursos como agua, energía, materias primas vírgenes, puede hacer parecer que este material es más sostenible. Al principio pensamos que habíamos tenido una buena idea, pero cuanto más investigamos menos nos convencía, ¿quieres saber por qué? ¡Empecemos!

El plástico más utilizado para realizar este tipo de tejidos es el PET, el mismo que suele utilizarse para la fabricación de botellas de agua. Este plástico se recicla muy bien en el sistema de gestión actual de residuos (y mira que somos críticos con él, eh). Sin embargo, una vez que este material se mezcla con otros, como algodón, su tratamiento resulta casi imposible. ¿ A qué contenedor tiras una camiseta hecha de plástico y algodón? ¿Al amarillo o al orgánico?  Es muy difícil separar los materiales para volver a reciclarlos, por eso cuantos más materiales se use para producir la prenda peor.

El 75% de la ropa es enviada a vertederos o es incinerada en el plazo de un año a partir de su fabricación. Así que además del problema de los microplásticos nos encontramos con otra incongruencia. Si nuestro proyecto trata de dar vida a los residuos plásticos y hacer que puedan volver a reciclarse cientos de veces… ¿Por qué usarlos para una sola camiseta?

Prendas que todxs tenemos en el armario sin usar, porque creemos que no están a la moda (fast fashion), muestran en los últimos estudios que solo usamos de media unas 7 veces cada prenda. Este dato nos sorprendió tanto que fue determinante para desechar el tejido de algodón + plástico reciclado, ¿para qué íbamos a utilizar un material que puede tardar en degradarse más de 100 años si su uso de media iba a ser tan bajo?.

Vuelta a las materias primas vegetales

Así que seguimos buscando un tejido que se adaptara a nuestras ideas y que estuviera hecho localmente. Investigando vimos que muchos expertos apuestan porque los tejidos más sostenibles son los de origen natural como cáñamo y ortiga, entro otros. Pero son tejidos difíciles de encontrar y que tendríamos que importar, encareciendo mucho el producto final y su huella de carbono. Pero si tú tienes esa opción no dudes en optar por ella.

Camiseta de plástico reciclado

Son esos mismos expertos los que sitúan al algodón orgánico como una buena alternativa hacia la sostenibilidad. Nos gusta recalcar la palabra orgánico, porque para producir el tejido necesario de una camiseta de algodón convencional se requieren unos 20.000L de agua. Este consumo de agua se reduce hasta en un 70% en cultivos orgánicos.

Pero este no es el único punto positivo que tiene el algodón orgánico. Según la Organic Trade Association el 10% de los pesticidas y más del 25% de los insecticidas que se consumen en el mundo, se usan en el cultivo de algodón convencional. Causando graves daños al medio ambiente por las sustancias tóxicas que los componen, dañando el aire, el agua y el suelo.  Además pueden perjudicar a los seres humanos, ya que muchos de estos cultivos se producen en países más vulnerables, donde los trabajadores no disponen de equipos de protección. Todas estas condiciones no solo no se dan en el cultivo orgánico, si no que además gracias a la rotación de cultivos se enriquece el suelo de nutrientes. También favorecen la biodiversidad al no utilizar sustancias tóxicas las plagas se equilibran con otros animales como pájaros o arañas. Y por supuesto son de comercio justo y favorecen la igualdad social.

Camiseta de algodón orgánico

Nuestra estampación ecológica

Así que ¡tejido elegido! Ahora solo faltaba una cosa, la tinta. Esta también debía ser respetuosa con el medio ambiente, así que nos aseguramos que fuera libre de sustancias como: metales pesados, hidrocarburos o formaldehídos.  Estos además de ser dañinos para el medio ambiente, lo son para las personas. Por ello las tintas empleadas en nuestras camisetas tienen el certificado ECO PASSPORT de OEKO-TEX.

Camiseta Menor Plastic

Camiseta de algodón orgánico.

Después de tanto esfuerzo de investigación podemos decir que sí, que nuestras camisetas son sostenibles. Muchas veces nos parecen caros este tipo de productos, pero realmente es lo que valen. Si las grandes industrias pueden permitirse vender camisetas a 5 € es porque lo pagamos nosotrxs como sociedad. Es lo que se conoce como costes ocultos. Es cierto que no todo el mundo puede permitirse gastarse 20 € en una camiseta, pero también es verdad que muchas camisetas de las grandes industrias se vende a ese precio cuando realmente el coste de producción ha sido muy bajo.

Camiseta keep

Nos encanta nuestro logo en pequeñito.

Con esto no queremos convenceros para que compréis nuestra camiseta (ya sabéis que no queremos fomentar el consumo innecesario), simplemente os invitamos a reflexionar sobre la relatividad de la sostenibilidad. Pensar que lo que para una región o país puede ser sostenible, para ti no tiene porque serlo. Piensa bien tus compras e intenta generar el menor impacto posible siempre. Si compras en comercios de tu localidad verifica que el producto también sea de comercio local o cercano. Pero si por otro lado tu mejor opción es recurrir a Amazon, ya sea por no encontrar alternativas cercanas o por vivir en zonas alejadas de grandes urbes, no pidas tus productos de uno en uno. Espera siempre a tener varios para hacer tu pedido. De esta manera ahorraremos el CO2 de cada transporte.

¡Hasta aquí nuestro blog sobre camisetas sostenibles!

¡Saludos y conciencia!