LA MEJOR ALTERNATIVA AL AGUA EMBOTELLADA

Tanto Rubén como yo, nunca habíamos vivido en una zona costera, por lo que no teníamos que comprar agua embotellada para nuestro día a día. A raíz de mudarnos a la playa, donde el agua es potable pero muy dura, tuvimos que empezar a hacerlo. Encima nos mudamos a finales de mayo, con el verano y las elevadas temperaturas características de Murcia a la vuelta de la esquina. Gastábamos unas dos o tres garrafas de 8 litros a la semana.

Al empezar con Menor Plastic y declarar enemistad total a los plásticos de corto uso, cada vez nos dolía más ver esa cantidad de residuos cada semana. Además, no queríamos formar parte de los 500. 000 millones de botellas de plástico que se producen anualmente. Entonces comenzamos a barajar diferentes alternativas para evitar esta fuente de desechos de plásticos de corto uso.

Algunas alternativas

Una de las alternativas más rápidas era hacernos con una jarra filtradora. En cambio, las críticas a este tipo de productos por su baja efectividad eran tantas, que las descartamos inmediatamente.Y la OCU no recomienda su uso como podéis ver en este enlace. También nos informamos sobre determinadas empresas que sirven el agua a casa y dejan un dispensador. El problema en estos casos es la huella de carbón que se produce mensualmente por el transporte. Además, nos parecía engorroso tener que estar pendientes de la cantidad de agua que quedaba y llamar a terceros continuamente. A base de ver los pros y los contras de cada alternativa, descubrimos la mejor solución: filtros de carbón activo.

Carbón activo de bambú.

Nos pareció la mejor opción porque es sostenible, fácil de utilizar y económico. Estos filtros pueden ser de muchos materiales. Nosotros escogimos el de bambú puesto que es una planta de rápido crecimiento, absorbiendo grandes cantidades de CO2. Por tanto, las emisiones producidas en su fabricación o transporte podrían considerarse de cero. Eso sí, al ser de rápido crecimiento, tuvimos mucha precaución en asegurarnos de que procedía de un cultivo controlado. De esta forma evitamos que pueda convertirse en una especie invasora.

¿Cómo funciona el filtro?

Al principio parece magia. Resulta difícil comprender que una barrita de bambú sea capaz de filtrar el agua. Pero no se trata de magia, sino de física y química.

El producto vegetal que va a actuar de filtro ha recibido previamente un tratamiento. Como resultado se obtiene un carbón más poroso que el regular, teniendo excelentes propiedades absorbentes. Caracterizándose por poseer propiedades que le permiten atrapar una gran diversidad de moléculas. Entre los compuestos químicos que pueden quedar adsorbidos se encuentran los pesticidas. Además, muchos estudios abalan que reduce la dureza del agua, que es justo lo que nos interesaba.

¿Cómo se utiliza el filtro?

El primer día que se va a utilizar debemos cepillarlo y lavarlo con agua. Después se tiene que hervir en agua durante 5-10 minutos. ¡Ya estaría listo para su utilización!

En el caso de los filtros que utilizamos nosotros, cada barra de carbón activo filtra 2L de agua. Para eso tenemos dos jarras de agua de esa capacidad, metemos el filtro y lo dejamos actuar de 6h a 8h. Después de ese tiempo se saca y el agua está lista para beber.

Carbón activo filtrando agua

Es cierto que los primeros meses con 6h era suficiente para que el agua quedara con buen sabor, pero con el paso del tiempo y después de varios usos necesitaba 8h. Algo importante es volver a lavar el filtro metiéndolo en agua hirviendo durante 5-10 minutos cada 2-3 semanas. La durabilidad del filtro suele ser de unos 3 meses si no se deja descanso. Es decir, si ponemos a filtrar el agua 8h y seguidamente ponemos ese mismo filtro en agua nueva. Nosotros sí lo hemos dejado descansar en algunos periodos que pasábamos poco tiempo en casa, durando 5 meses.

Cuando notes que el sabor del agua no es bueno después de usar el filtro durante 8h, es el momento de cambiarlo. Lo vas a notar perfectamente. Lo bueno, es que una vez obsoleto para filtrar, el carbón activo puede tener más usos, como meterlo en el armario para prevenir la humedad o en las zapatillas para evitar los malos olores.

Aunque pueda parecer un poco engorrosa esta alternativa al agua embotellada, lo cierto es que es muy cómodo y es cuestión de adquirir nuevos hábitos. Nosotros ponemos el filtro por la noche antes de irnos a dormir y así tenemos agua lista para el día siguiente.

A continuación, os dejamos el enlace donde podéis consultar el filtro de carbón activo que estamos utilizando nosotros.